lunes, 5 de diciembre de 2011

Por el camino de la precariedad...

¡Hola compañeros!

Las condiciones de trabajo de los periodistas han sido un tema central en la red durante el fin de semana a raíz de la denuncia de una periodista que se negó a trabajar gratis.  El tema se convirtió en ‘trending topic’ en la red social Twitter con el hagstag #gratisnotrabajo. Periodistas españoles han expresado su indignación por las ofertas de trabajo cada vez más precarias que han recibido en los últimos meses, con pretensiones, además, de máxima calidad.

El debate lo inició una periodista a la que le ofrecieron 0,75 euros por cada artículo de 800 caracteres que consiguiera colocar en foros y blogs hablando de una marca de complementos para bodas, bautizos y comuniones. Una cantidad ridícula y humillante para la profesión. Para cobrar tenía que demostrar la publicación de 400 artículos mensuales y lograr un mínimo de 300 euros. Si no conseguía esta cantidad se acumulaban las ganancias para el mes siguiente.

La Asociación de la Prensa de Madrid inició el debate en las redes sociales e instó a otros profesionales a que denuncien situaciones de explotación similares.

En la red social se ha querido denunciar, además de los salarios bochornosos, que muchas veces se intente hacer pasar la publicidad por periodismo, aprovechando la desesperación de muchos profesionales sin trabajo, especialmente los más jóvenes, que se prestan por necesidad a este tipo de artículos. Todo ello contribuye a devaluar aún más una profesión muy castigada ya por la crisis.

Casi todos los periodistas han trabajado gratis en alguna ocasión, algo que no se plantea en ninguna otra profesión. Se considera normal en el gremio, como parte del ‘precio’ que hay que pagar para conseguir posteriormente un contrato.  Algunos profesionales contaban en Twitter que es frecuente recibir llamadas para dar conferencias sin cobrar, pero que nadie llama a un fontanero o a un carpintero para que haga una reparación a domicilio gratis.

Ante esta situación bochornosa, no cabe otro camino que reaccionar con contundencia y defender la profesionalidad periodística y los derechos como trabajadores. En ese ámbito deben jugar un papel importante las asociaciones de profesionales del sector.VC

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